Dos importantes cosas a tener en cuenta

Antes de que te quieras aprender defensa personal hay que tener en cuenta que toda agresión callejera, puede tener dos tipos principales de consecuencias:

1) La primera es la salud de la víctima o del agresor (heridas o muerte.
No solo nos referimos a cuestiones físicas sino que con frecuencia la víctima aún sin haber sido lesionada corporalmente, puede quedar con secuelas psicológicas a causa del shock recibido.

2) Consecuencias legales: por supuesto, que no pretendemos atacar a nadie, por lo que cualquier tipo de violencia ejercida sobre quien nos agrede parecería justificada.
Sin embargo, para la Ley esto no es tan sencillo y debemos tener presentes algunos principios que podría variar según la legislación de cada país.


Con esto nos referimos a que tendremos que probar la famosa frase conocida como “legitima defensa”, es decir, la protección de uno mismo o un tercero de una agresión ilegítima, con racionalidad en los medios y que no haya existido provocación por parte del que se defiende.

O sea, que el defensor solo acciono en defensa propia contra el atacante, y no fue impulsado por venganza u otros intereses que el de protección y que el medio utilizado para ejercer dicha defensa no exceda los parámetros de razonabilidad:

Por ejemplo: No es lógico que me defienda ante un golpe de puño de un agresor con apuñaladas de navaja en su estomago.

Siempre antes de haber optado por la confrontación, tuvimos que haber descartado cualquier tipo de posibilidad de razonamiento o escape ante el agresor


Finalmente, se deben tener en cuenta también las circunstancias en las que ocurren los hechos: no es lo mismo defenderse por la noche de un ladrón, que en pleno día de un individuo nervioso o con sus sentidos alterados por la ingesta de algún tipo de droga. En este caso debemos pensar que tal vez la justicia puede considerar en algunos casos, que el mismo estaba en inferioridad de condiciones dado su estado y, si causamos daños, deberemos probar que no había otra posibilidad mediante testigos y otros medios adecuados.